lunes, septiembre 04, 2006

CRITICAS A MI TIERRA: EXTREMADURA

Cilleros, con un sector servicios potente, patriótico y respetuoso con el paisaje, da la bienvenida al viajero que se adentra en Sierra de Gata.CUARENTA Y POCOS años me ha costado desengañarme a cerca de la realidad de mi tierra. Ha sido un proceso lento, una maduración dolorosa. Un ir del todo a la nada. Ahora, al fin, y para mi desgracia, ya lo veo. Vengo de una tierra extraña, de un Sefarad mental de habitantes regalados de sí mismo. Extremadura no es lo que yo pensaba. Extremadura es digna de una profunda reflexión; de un psicoanálisis. De una destilación dolorosa y lenta de ideas. De pinceladas de indignación, sorpresa y catarsis. De mucha autocrítica.

Me culpa, "semus asina". ¡Vivan Gabriel y Galán y Carolina Coronado! únicos literatos de nuestro sistema educativo...¿O debería decir Grabiel...?.

En fin, entonaré un Yo Acuso "zoliano" contra el Coronel Paty que vive en todos y cada uno de los extremeños. Extremadura vive una relación absurda con su paisaje. Lo destroza premeditadamente allí donde mas duele, donde todos lo ven, a la orilla misma de la carretera. Extremadura hace una extraña propaganda de desarrollismo como queriendo decir "mirad que modernos somos; mirad que naves industriales, que moderna arquitectura, cuanto cemento, cuanta chatarra; mirada como aprovechamos el material de deshecho para poner cercas al campo, las bañeras viejas como abrevaderos de ganado, los somieres oxidados como vallas; mirad que viveros de plásticos rotos, que anuncios de semillas; mirad los mil y un usos que puede tener un neumático...

Se que con estas opiniones seré objeto de crítica, pues el extremeño no es criticable en su perfección no exenta de complejo, así pues, me someteré a la crítica pero, que se sepa, que el mas dolido con lo que aquí diga seré yo, natal de Coria, de padre Sierra Gatino y madre Pacense, de abuelos Valverdeiros Rayanos, otros de "Moraleha" y otros nacidos en corazón mismo de Badajoz...El mas dolido seré yo porque cada vez que veo como emborronamos paisajes dignos de Corot con basura y arquitectura demoníaca me duele el alma y el bolsillo, pues ningún desarrollo social o económico de nuestra tierra es ajeno a la pésima imagen que, absurdamente, damos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si no fuistes capaz de apreciar la aportación positiva de esos pequeños detalles que conforman nuestro entorno, no serás capaz de sentir nunca la cercanía y riqueza de nuestra gente. Existe algo más de lo que tus ojos no llegaron a ver y tanto empeño te costo fotografiar.